Qué ironía: Eligió ser carpintero, cuando sabía que moriría en un madero

¿No es éste el carpintero, hijo de María...? (Marcos 6:3a)
 
Foto: Trabajando en madera.

Cuando Jesús era joven y trabajaba en la carpintería, ¿habrá pensado en lo que le esperaba? Él sabía lo que tendría que pasar y cómo moriría ¿Mientras golpeaba con el martillo para hincar un clavo en la madera, pensaría que un día sería clavado en una cruz?

Yo creo que eligió esa profesión con una razón, porque Dios no hace nada por casualidad. Todos esos años en la carpintería, se fue preparando. Construir muebles y puertas clavando clavos en la madera, lo ayudó a entender que todo forma parte de un propósito. Años más tarde, ahí, clavado su cuerpo en el madero, pudo ver que estaba construyendo el proyecto más grande que cualquier artesano o ingeniero podía concebir.

La salvación de la humanidad no se conseguiría con materiales comunes, ni con armas, ni libros… tenía que entregar su vida, derramar su sangre en lugar del pecador ¡Y lo hizo!

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