Buenos días. A Dios no se lo puede engañar. Él sabe quien tiene un corazón que vale oro y quien es escoria.
Como es paciente les da tiempo para arrepentirse, pero llega el momento de quitar la escoria, de apartar de su iglesia los falsos cristianos, los que no aman, los que no perdonan, los que no buscan la santidad.
En su Palabra dejó escrito cómo podemos acercarnos a Dios, limpiar nuestro pasado y comenzar de nuevo. De nosotros depende ser guardados como oro o desechados como basura.