No te hagas ídolos, Dios es todo lo que necesitas

En la antigüedad los seres humanos, por ignorancia adoraban al Sol, la Luna, animales, cualquier cosa. Las pinturas rupestres que reflejaban sus actividades diarias, como la caza, el cultivo, la fertilidad, adquirían un sentido mágico. Lo hacían porque no conocían al verdadero Dios.

Pero nosotros hemos conocido al Dios Todopoderoso, creador de todo lo que vemos y también de lo que no vemos. Sabemos que él se preocupa por nosotros. En su Palabra nos dice: «Por lo tanto, no se preocupen ni se pregunten “¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?” Porque la gente anda tras todo esto, pero su Padre celestial sabe que ustedes tienen necesidad de todas estas cosas. Por lo tanto, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.» (Mateo 6:31-33 RVC)

Quizás nos hicimos ídolos sin darnos cuenta: el dinero, nuestra capacidad, la familia. Cualquier cosa a la que damos demasiada importancia, cosas en las que confiamos que van a resolver nuestros problemas. La realidad nos dice que ni el dinero, ni la inteligencia, ni los contactos pueden ayudarnos cuando Dios no está de nuestro lado. Pero «¿Qué más podemos decir? Que si Dios está a nuestro favor, nadie podrá estar en contra de nosotros.» (Romanos 8:31RVC)