dinero

Él perro guardián cuida lo suyo, pero el avaro pierde la bendición de Dios. “Por tanto, daré a otros sus mujeres, y sus campos a quienes los conquisten; porque desde el más pequeño hasta el más grande cada uno sigue la avaricia; desde el profeta hasta el sacerdote todos hacen engaño.” Jeremías 8:10

Avaricia

El perro guardián gruñe al que se acerca a su casa. Es su tarea cuidar que nadie robe o dañe a su familia. El avaro casi gruñe cuando se trata de gastar dinero, pero eso no esa no es su función. Dios quiere que cuidemos lo que nos da, pero sin olvidarnos del amor al

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¿Le das las sobras? [Foto: perro callejero] Lucas 21:4 “Porque todos aquellos echaron para las ofrendas de Dios de lo que les sobra; mas esta, de su pobreza echó todo el sustento que tenía.”

¿Le das las sobras?

Si Jesús caminara sobre la tierra, ¿lo invitarías a sentarse a tu mesa? ¿O como a un perro callejero le darías las sobras? Cuando amamos a alguien queremos darle lo mejor. Resulta fácil entregarle nuestro tiempo, ofrecerle nuestro servicio, brindarle también cosas materiales. Si amamos a Jesús cualquiera se dará cuenta, no por nuestras palabras

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