Reparador de portillos

Ayer estaba conversando con una hermana de la iglesia y el Señor me hizo acordar que somos un edificio. Cristo es la roca que sirve de cimiento y los demás somos piedras o ladrillos. Cuando un ladrillo se ensucia lo limpiamos, pero en la iglesia no es así, si lo vemos sucio de pecado lo queremos sacar de la pared. No pensamos que el edificio se debilita y mucho menos qué será de esa piedra. Los fariseos pensaban así. Cristo es la piedra desechada que Dios convirtió en la principal piedra del ángulo.

Portillo es una abertura o grieta hecha en una pared o muro que los enemigos usaban para entrar en la fortificación. Viene de la misma palabra que “puerta”.

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