
¡Buenos días! Qué bueno saber que Jesús se anticipa a nuestras necesidades.
No sólo les dio un pescado para su hambre. Lo cocinó y compartió el momento con ellos como un buen amigo.
Él tiene lista la solución a tu necesidad. Su Espíritu Santo está contigo, quiere hablarte como amigo, pasar tiempo juntos. Te comparte sus fuerzas, te da la fortaleza que buscas. Te da fe para alcanzar la victoria, el gozo que no apaga ninguna circunstancia…