En el desierto Dios los preparó para la Tierra Prometida

El pueblo de Israel todavía estaba en el desierto cuando recibió esta palabra. El Señor les dio sus leyes, por medio de Moisés, y les advirtió que al entrar en la Tierra Prometida no se olvidarán que no era por su fuerza o capacidad que tendrían esas propiedades sino que eran bendición de Dios.

Si estás en un desierto, escucha lo que Dios te habla y aprende para que puedas recibir y conservar tu «Tierra Prometida».

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