Cuando pienso que cada palabra incluida en la Biblia fue planeada por Dios porque conocía de antemano lo que necesitábamos saber, me maravillo.
Pero incluso Dios planeó la palabra que tenía que llegar a nosotros cada día: Por una canción, un mensaje de WhatsApp, una frase escuchada en la calle al pasar… ¡El Señor no deja de hablarnos! Quiere animarnos, fortalecernos y hacernos crecer.
Da importancia a cada versículo que oyes o lees ¡Fue escrito pensando en ti! ¡Dios planeó el momento exacto para que lo recibas, porque sabía que era lo que ibas a necesitar!