Cuando Dios te pode y sientas el dolor de perder esas cosas que amabas, recuerda que eres un pámpano de la vid. Jesús, la vid, siente la pérdida de cada ramita cortada a cada pámpano ¿Cómo lo aguanta? Porque sabe que así llevaremos más fruto.
Cuando Dios te pode y sientas el dolor de perder esas cosas que amabas, recuerda que eres un pámpano de la vid. Jesús, la vid, siente la pérdida de cada ramita cortada a cada pámpano ¿Cómo lo aguanta? Porque sabe que así llevaremos más fruto.