Ídolos que se convierten en trampa

Muchos adoran al placer y terminan atados por demonios.

“Adoraron a los ídolos de ellos y eso se les convirtió en una trampa, pues resultaron ofreciendo a sus propios hijos e hijas como sacrificio a esos demonios.” Salmos 106.36-37 PDT

Lo que idolatras te atrapa