Cuando las cosas salgan bien recuerda: es porque Dios es bueno. Cuando las cosas salgan mal, no olvides: Dios es bueno. Aunque no puedas entender, alábalo porque Dios es bueno. Y al final verás su bondad y misericordia.

Cuando las cosas salgan bien recuerda: es porque Dios es bueno. Cuando las cosas salgan mal, no olvides: Dios es bueno. Aunque no puedas entender, alábalo porque Dios es bueno. Y al final verás su bondad y misericordia.
