Dios no te pide nada difícil: solamente que descanses con la confianza que Él se ocupa de tus problemas. No seas rebelde como Israel que en vez de quedarse tranquilo, demostrando así su fe, buscó ayuda humana y le fue mal.
Dios no te pide nada difícil: solamente que descanses con la confianza que Él se ocupa de tus problemas. No seas rebelde como Israel que en vez de quedarse tranquilo, demostrando así su fe, buscó ayuda humana y le fue mal.