Cada vez nuestra sociedad se vuelve más violenta. Muchos son golpeados e incluso muertos para robarles un celular. Niños pequeños no están seguros en sus hogares, porque sus propios parientes los acosan. Y no hablemos de los niveles de violencia en la TV, los video juegos o en Internet.
¿Adónde vamos a llegar? ¿Dónde encontrar un refugio de paz?
Dios nos invita a su Casa. Allí va a calmar toda tormenta. Si le rendimos nuestras vidas, promete seguirnos como sombra para protegernos y guiarnos para no caer en las trampas del enemigo.
No dudes. Si buscas calma, busca al Dios de paz.