El año se va y seguimos dormidos.
Es hora de orar. Es tiempo de apoyarse en las fuerzas de Dios. Busquémoslo con todas nuestras fuerzas, antes que nuestros pecados nos hagan marchitar.
El año se va y seguimos dormidos.
Es hora de orar. Es tiempo de apoyarse en las fuerzas de Dios. Busquémoslo con todas nuestras fuerzas, antes que nuestros pecados nos hagan marchitar.