Los cormoranes roqueros que se ven en la foto, se llaman así porque hacen sus nidos en la roca. Nosotros también necesitamos construir nuestro hogar en la Roca, que es Cristo.
Cuando nuestro corazón desmaye por la preocupación, la angustia o el agotamiento podemos clamar a Dios y él nos oirá. Sabemos que si necesitamos ayuda, en las grandes ciudades es fácil encontrar profesionales y empresas de todo tipo, pero en las ciudades pequeñas y pueblos es más difícil conseguir los servicios que necesitamos. Pero nuestro Señor está disponible hasta en el cabo de la tierra, hasta en el último rincón que nadie conoce. Él nos pondrá en lugar seguro, donde estaremos firmes y podremos descansar tranquilos.
Les comparto una alabanza basada en este Salmo.
Alejandro Alonso – Salmo 61